"Mi hijo está muy delgado, pero se mantiene firme"



"Mi hijo está muy delgado, pero se mantiene firme"

Dijo la madre del prisionero político cubano Antonio Guerrero, después de visitarlo en la prisión de Florence, en Denver, capital del estado norteamericano de Colorado
JORGE GARCÍA ORCE

Injustamente condenado a cadena perpetua, "mi hijo va a preservar su ánimo, su salud y su honor", declaró Mirta Rodríguez, madre del Héroe cubano Antonio Guerrero, tras su regreso a Cuba en la noche del martes anterior, luego de visitarlo en una prisión norteamericana.
Desde las vistas de sentencia a fines del año pasado, Mirta no veía a Tony con quien pasó "momentos maravillosos" el pasado Día de las Madres, que en Cuba se festeja cada segundo domingo de mayo.
"Pudimos estar juntos cinco horas. Conversamos de todo, jugamos barajas, nos retratamos", dijo la madre, acompañada en el viaje a Estados Unidos de su nieto santiaguero, quien hacía cinco años no veía al padre.
"Tonito lloró y se abrazaba fuerte a él, que sólo decía 'Mira a mi hijo' 'Ese es mi hijo'. Fue un premio que Tonito pudiera viajar (a ver al padre)".
Mirta Rodríguez, quien cumplió 70 años el miércoles 22 de mayo, dijo a la estación provincial de radio de Santiago de Cuba; que, aunque está muy delgado, su hijo se ve más recuperado físicamente, "está haciendo ejercicios y ha cogido sol", lo que era imposible en la prisión federal de Miami, un edificio totalmente cerrado.
Antonio Guerrero, Héroe de la República de Cuba, esta confinado ahora en la prisión de Florence, en Denver, capital del estado norteamericano de Colorado; una de las seis penitenciarías con régimen más severo de ese país.
"Tiene gran acogida entre los demás presos porque su carácter se presta a hacer amistades. Agradece todo este apoyo del pueblo, que él considera más de lo que pudiera merecer.
"Y no te da tiempo a flaquear. Tan pronto lo ves se le desprende la sonrisa".
Antonio Guerrero es uno de los cinco luchadores cubanos contra el terrorismo que fueron encausados el pasado año en Miami por espionaje, delito que no pudo probarse en un juicio turbio, manejado por los grupos mafiosos que desde el sur de la Florida planean y ejecutan acciones criminales contra Cuba.